¿Cómo vender rápido un piso heredado?
Vender rápido un piso heredado quizás sea lo último que se te pase por la cabeza. Después de la muerte de un ser querido uno no tiene ganas de solucionar el papeleo. Pero para que no haya problemas más adelante, es esencial hacerlo dentro de los plazos establecidos.
Ocurre lo mismo con la venta de la propiedad del fallecido. Si se ha decidido que se va a vender, hacerlo pronto evitará tener problemas con el resto de los familiares. Eso hará que la familia tenga una mejor relación, al no quedar temas importantes que solucionar.
Te contamos qué pasos debes seguir para hacer que la venta sea lo más rápida posible, al mejor precio y con el menor número de problemas. ¡Toma nota!
4 pasos a seguir para vender un piso heredado
1. Tener la documentación de propietario legal de la vivienda
Aunque seas el heredero directo en el testamento no eres aún el propietario de la vivienda. Para ello debes conseguir el testamento y el certificado de últimas voluntades de la persona fallecida.
Seguidamente tienes que aceptar la herencia ante notario. Si sois varios herederos se hará mediante escritura pública. Donde se firmará el porcentaje que corresponde a cada uno. Si por el contrario eres el único heredero, bastará con firmar la instancia de aceptación.
Después de esto hay que pagar los impuestos de sucesiones y donaciones. El plazo máximo para hacerlo es de un año, contando desde la muerte del propietario de la vivienda.
Pero hay que tener en cuenta que también hay que abonar la plusvalía municipal. Y esto debe realizarse en los 6 primeros meses desde el fallecimiento del familiar.
Cuando ya has realizado todos los pagos y tienes toda la documentación, debes dirigirte al Registro de la Propiedad. Allí se realizará el cambio de nombre y es justo cuando los herederos se convierten en propietarios legales de la vivienda.
Por lo que hasta que no se realicen todos estos trámites, el heredero no es propietario de la vivienda.
2. Elegir el momento mejor para venderla
Si se tiene claro que se quiere vender la propiedad heredada, lo mejor es hacerlo cuánto antes. Hacerlo entre los seis meses después del fallecimiento del familiar, es más beneficioso para el que compra. Por lo que se podrá vender antes.
El nuevo propietario que compra la vivienda en ese plazo, puede evitar posibles recargos del impuesto de venta. Lo que haría la compra más económica para él.
Hay que tener presente que este impuesto de venta se fija por el lugar de residencia de la persona que acaba de fallecer. Por lo que donde esté ubicada la vivienda no es relevante.
3. Buena comunicación y organización familiar
Es un paso clave para conseguir vender la propiedad de forma efectiva y sin problemas familiares. Lo idóneo es aclarar todas las decisiones y después elegir un único interlocutor.
Todo tiene que estar hablado y organizado, como establecer unos márgenes de negociación de precio. Esto hace que el interlocutor puede decidir sin tener que consultar en cada momento a los demás.
En este parte no hay que dejarse llevar por la parte sentimental de la vivienda. Sino ser realistas y tener claro el valor real de la propiedad antes de ponerla a la venta.
4. Dejarse asesorar por profesionales
En un momento tan delicado de la vida, lo mejor es contar con la ayuda de expertos. Ellos trabajan con estos casos a diario y saben como funciona exactamente la normativa.
Por otra parte vender una casa sin experiencia no es tarea fácil. Y más cuando desearías venderla en los seis primeros meses para beneficiar al futuro comprador.
Contar con una inmobiliaria dedicada al cien por cien a vender tu casa, hará todo más rápido y sencillo para ti. También evitará posibles disputas familiares al delegar en profesionales.
En Factoryhouse podemos gestionar la venta de tu vivienda de principio a fin. Lo hacemos de forma rápida, solemos encontrar compradores en seis semanas.
¡Y lo más importante es que no hay pagos iniciales! Únicamente pagarás nuestro trabajo, cuando tu propiedad esté vendida. ¡Puedes saber más sobre nosotros aquí!